Los villanos son los personajes que encarnan el mal, son
normalmente quienes crean los problemas en los que se desarrolla una historia.
Son antagonistas, enemigos jurados del héroe. Son personajes de suma importancia,
puesto que sus acciones tienen mucho más impacto que las de los personajes
secundarios, son tan significativos como el personaje principal.
Los villanos son personas (o a veces cosas) que actúan
golpeando en la cara a la moral. Son malos, sus acciones son crueles y
egoístas. Generalmente buscan cosas como dinero y poder por métodos malvados,
siendo “conquistar el mundo” su meta clásica.
Cabe mencionar que no siempre los antagonistas
son villanos, pero la mayoría de las veces es así.
Los villanos usualmente son científicos locos, ejecutivos
malvados, políticos corruptos, brujas malvadas o guerreros sedientos de sangre.
Maldad pura, la narración no deja duda. Son personajes con mucho poder o
influencia, pueden hacer lo que deseen porque la gente común y corriente no es
capaz de hacerles frente. Es aquí donde entra en escena el héroe, el único con
la fuerza y la convicción para poder encararlos y salir victorioso.
Las cualidades de los villanos pueden ser tan variables como
las de los héroes. No obstante, a los villanos se les puede reconocer un par de aspectos
comunes. Poseen inteligencia superior y siempre tienen planes malvados, si no
es así, son personajes brutales que actúan de la forma más ruin posible. La otra
cualidad usual, bastante reconocida, es su determinación; ya que no importa
cuántas veces el héroe los venza, les rompa la cara o los mande a prisión,
ellos siempre vuelven al mal camino, haciendo destrozos o con otro plan
maléfico. Y seguirán así hasta el día en que mueran. Redimir a un villano es
incluso más difícil que enseñarle trucos a un gato.
Los villanos deben ser personajes impresionantes, es de suma
importancia, ya que el prestigio de los héroes depende directamente de los
villanos que derrotan. ¿Qué puede hacer un héroe sin rivales? Además, nadie
respetaría a un héroe que venza villanos patéticos, eso no es heroico.
Se dice muy sabiamente que “un héroe es tan bueno como lo
son sus rivales”. Entre mejores villanos haya, mejores son los héroes. Muy
difícilmente se puede romper este balance.