La Ley de lo Asombroso

miércoles, 16 de mayo de 2012



Una obra de ficción puede ser todo lo irreal que desee, el público estará contento y de acuerdo mientras los resultados sean geniales y espectaculares.

El límite de la Suspensión Voluntaria de la Incredulidad para un elemento es directamente proporcional a su nivel de genialidad. O sea que la audiencia acepta elementos poco realistas en la medida en que estos elementos sean emocionantes. Si algo es sumamente irreal, ellos lo aceptarán sólo si es  estupendo. Algo menos fantástico no necesita ser tan genial.
Si algo es bastante poco creíble y a la vez no tiene mucha gracia o ingenio, la audiencia lo resentirá. Se debe ser asombroso, eso es lo espectacular y llamativo de la ficción.

Si bien la gente puede diferir en opinión sobre si la genialidad de un elemento vale el poco realismo, el público en general coincide, o al menos una cantidad considerable de la audiencia lo debe aprobar. De lo contrario esta regla se rompe y puedes decirle adiós a tus fans.


La Ley de lo Asombroso también es un principio que busca  sobreponerse a los argumentos que se exponen sobre los aspectos inverosímiles de una obra de ficción.
Por supuesto, ni el más fuerte de los guerreros podría levantar un brontosaurio; un espadachín no podría cortar las balas que se le disparan; los muertos no pueden levantarse; el tiempo no puede regresarse; no existen puertas a otras dimensiones; nadie sobreviviría si le cae un meteorito; los objetos inertes no pueden cobrar vida; y demás, todo esto es implausible, irreal, fantasioso. Pero las historias que hablan sobre todo esto son tan geniales que no nos importa si la física o cualquier otra ciencia nos gritan que es imposible. ¿Qué gracia tendría la ficción si sólo se pudiera hablar de cosas consideradas reales? ¿O si todo fuera esperado y poco espectacular?   

Claro que esto se refiere más precisamente cuando una obra es de por sí fantástica y se introduce alguna situación todavía más fantástica de lo usual. Las obras que intentan ser más apegadas a lo real difícilmente pueden invocar a esta regla. 



Este artículo está basado en el tema:
"Rule of Cool" de la página tvtropes.org